Esto sí que es un punto sensible para los alemanes. Eso de tutear a todo el mundo como acostumbran los latinos, aquí no se hace, está mal visto. A los alemanes les gusta marcar distancia.

Un ejemplo donde a mí todavía me resulta raro es en la guardería de mi niña. Las maestras son jovencitas y quizá por la edad y por lo informal del entorno, le pregunté a una de ellas al principio que si la podía tutear y me dijo que no. Que no tienen permitido que se les tutee. Se les puede llamar por su nombre (y no por el apellido como se acostumbra en todas partes), pero el trato es de usted.

Quizá con el pasar del tiempo y con algunas personas, puedas pasar al trato de tu, pero en líneas generales no se tutea.