La burocracia tiene su hogar en Alemania y los alemanes son los reyes de ella. Sin exagerar, éste es el paraíso de la burocracia. Para cualquier trámite, sencillo o complejo, necesitas un papeleo interminable y llenar formularios en un tipo de alemán algo odioso, el alemán oficial. Se pudiesen formular todos los términos de una manera más sencilla, ¿pero para qué hacerlo así si se puede hacer complicado?

Hacer trámites acá es bastante tedioso y te piden muchas cosas, pero todo funciona y tú sabes que al final obtendrás lo que necesitas (sin corrupción como suele ocurrir en muchas partes de Latinoamérica). Solo se necesita paciencia para atravesar el proceso.