De Venezuela recuerdo que algunos vecinos del edificio ponían en la noche música a todo volumen y no dejaban dormir a nadie. La idea de reclamar allá tampoco era la mejor a fin de evitar conflictos. Había normas generales para el edificio, pero mucha gente no les paraba, lamentablemente Venezuela al fin.
Sin embargo, en Alemania las cosas funcionan diferente. Los alemanes valoran mucho el silencio y no les gusta el ruido. Es por esto que aquí existe la Ruhezeit, o tiempo de descanso. Este tiempo puede variar de acuerdo al sitio donde se viva, pero en líneas generales significa que entre 1 y 3 pm, y de 10 pm a 6 am está prohibido hacer ruidos fuertes que puedan molestar a los vecinos. Por ejemplo, aspirar, tener música alta, usar lavadoras o secadoras, taladrar paredes y cosas por el estilo.
Lo que me encanta de Alemania es que aquí las normas, reglas y leyes no están de adorno, sino que se hacen cumplir y la gente las respeta. Como en todo, nunca faltará algún desajustado por ahí que no se atenga, pero en líneas generales todo funciona muy bien. Los alemanes respetan el silencio y el espacio de los demás.