Los alemanes aman el chocolate, de hecho es su dulce favorito. Alemania es el país donde más se consume chocolate en el mundo entero. Este primer puesto ha estado reñido con Suiza. Sin embargo, a raíz de la pandemia, el consumo de esta deliciosa y adictiva golosina aumentó considerablemente en Alemania, lo cual llevó al país a posicionarse en el primer lugar.  Entre la ansiedad y el encierro, la gente recurrió al chocolate, catalogándolo como el dulce para los nervios por excelencia.

Los consumidores alemanes consumen más de 9 kilos de chocolate al año. Ya sea en barra, bombones, chocolate en polvo para bebidas, postres, etc. La oferta de chocolates en Alemania es inmensa. Aquí se consigue de todo lo que se te pueda ocurrir y en un amplio rango de precios, desde los más baratos en los Discounters, hasta los más finos y costosos en tiendas especializadas.

El chocolate es tan especial en Alemania que incluso existe un Museo de chocolate en la ciudad de Colonia. Aquí puedes aprender todo sobre su producción, desde el origen de los granos del cacao hasta su manufactura en las fábricas. El precio de la entrada es de 12,50 euros.

Estadísticamente son pocas las personas a las que no les gusta el chocolate. Yo particularmente he conocido en toda mi vida solo a dos personas de este grupo, una en Venezuela y otra en Alemania. El resto pertenecemos al grupo de los amantes a esta divina creación. 😊